lunes, 21 de noviembre de 2016

Oración: "En busca de Dios" de P. Teilhard de Chardin


“¡Te necesito, Señor!,
porque sin Ti mi vida se seca.
Quiero encontrarte en la oración,
en tu presencia inconfundible,
durante esos momentos en los que el silencio
se sitúa de frente a mí, ante Ti.
¡Quiero buscarte!
Quiero encontrarte dando vida a la naturaleza que Tú has creado;
en la transparencia del horizonte lejano desde un cerro,
y en la profundidad de un bosque
que protege con sus hojas los latidos escondidos
de todos sus inquilinos.
¡Necesito sentirte alrededor!
Quiero encontrarte en tus sacramentos,
En el reencuentro con tu perdón,
en la escucha de tu palabra,
en el misterio de tu cotidiana entrega radical.
¡Necesito sentirte dentro!
Quiero encontrarte en el rostro de los hombres y mujeres,
en la convivencia con mis hermanos;
en la necesidad del pobre
y en el amor de mis amigos;
en la sonrisa de un niño
y en el ruido de la muchedumbre.
¡Tengo que verte!
Quiero encontrarte en la pobreza de mi ser,
en las capacidades que me has dado,
en los deseos y sentimientos que fluyen en mí,
en mi trabajo y mi descanso
y, un día, en la debilidad de mi vida,
cuando me acerque a las puertas del encuentro cara a cara contigo”.
P. Teilhard de Chardin.

viernes, 7 de octubre de 2016

AQUÍ ESTOY PARA HACER TU VOLUNTAD (ROBERT KENNEDY)

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Dios mío,
yo me abandono en tus manos.
Modela y remodela este barro como arcilla en manos del alfarero.
Dale una forma y después, si quieres, deshazla,
como fue deshecha la vida de mi hermano John.
Pide, ordena.
¿Qué quieres que haga?
¿Qué quieres que no haga?
Ensalzado o humillado,
perseguido, incomprendido, calumniado,
alegre y triste,
o inútil para todo,
sólo diré a ejemplo de tu Madre:
«Hágase en mí según tu palabra».
Dame el amor por excelencia,
el amor de la cruz.
Pero no de las cruces heroicas:
podrían aumentar mi vanidad,
sino las cruces vulgares
que llevo con repugnancia.
Aquéllas que se encuentran todos los días
en la contradicción, en el olvido, en el fracaso,
en los juicios falsos, en la frialdad,
los desaires y desprecios de otros,
en el malestar y defectos del cuerpo,
en la oscuridad de la muerte y en el silencio y aridez del corazón.
Y entonces Tú sabrás que te amo.
Eso me basta.

(Oración atribuída a Robert Kennedy, fue encontrada en el bolsillo de su chaqueta el día que lo asesinaron.) 

lunes, 29 de agosto de 2016

Oración del pastor Joe Wright en el senado de Kansas

Señor, venimos delante de Ti este día, para pedirte perdón y para pedir tu dirección. Sabemos que tu Palabra dice: "Maldición a aquellos que llaman bien lo que está mal" y es exactamente lo que hemos hecho.
Hemos perdido el equilibrio espiritual y hemos cambiado nuestros valores.
Hemos explotado al pobre y hemos llamado a eso "suerte".
Hemos recompensado la pereza y la hemos llamado "ayuda social".
Hemos matado a nuestros hijos que aun no han nacido y lo hemos llamado ”la libre elección".
Hemos abatido a nuestros condenados y lo hemos llamado "justicia".
Hemos sido negligentes al disciplinar a nuestros hijos y lo hemos llamado ”desarrollar su autoestima".
Hemos abusado del poder y hemos llamado a eso: "política".
Hemos codiciado los bienes de nuestro vecino y a eso lo hemos llamado "tener ambición".
Hemos contaminado las ondas de radio y televisión con mucha grosería y pornografía y lo hemos llamado "libertad de expresión".
Hemos ridiculizado los valores establecidos desde hace mucho tiempo por nuestros ancestros y a esto lo hemos llamado "obsoleto y pasado".

Oh Dios, mira en lo profundo de nuestros corazones; purifícanos y líbranos de nuestros pecados. Amen.

domingo, 10 de abril de 2016

ORACIÓN Madre Teresa de Calcuta: "Señor Crucificado y Resucitado"

Señor Crucificado y Resucitado,
enséñanos a afrontar los hechos de la vida cotidiana,
a fin de que podamos vivir dentro de una más grande plenitud.
Tú acogiste humilde y pacientemente los fracasos de tu vida
que te llevaron hasta los sufrimientos de tu crucifixión.
Ayúdanos a vivir las penas y las luchas que nos trae cada día
como ocasión para crecer y para asemejarnos más a tí.
Haznos capaces de mirar esas pruebas con valentía y mansedumbre,
llenos de confianza, porque tú nos sostienes.
Permítenos comprender que no llegaremos a la plenitud de la vida,
si no morimos sin cesar a nosotros mismos,
a nuestros deseos egoístas.
Porque solamente si morimos contigo, podremos resucitar contigo.
Que nada de ahora en adelante, nos haga sufrir o llorar
al grado de olvidar la alegría de tu Resurrección.
Tú eres el sol que resplandece del Padre.
Tú eres la esperanza de la eterna felicidad.
Tú eres el fuego del amor que incendia nuestros corazones.
Que la alegría de Jesús sea nuestra fuerza, 
que sea entre nosotros lazo de paz, de unidad y de amor.
Amén.

miércoles, 20 de enero de 2016

San Claudio La Colombìere:"JESÚS, MI ÚNICO Y VERDADERO AMIGO"


Jesús, tú eres el único y el verdadero amigo.
Tú te interesas por todos mis males,
te cargas con ellos
y conoces el secreto para convertirlos en bien,
tú me escuchas cuando yo te cuento mis aflicciones
y sabes consolarme en ellas.

Te encuentro siempre y en todo lugar
porque nunca te alejas de mí, 
y si tengo que cambiar mi lugar de residencia,
no dejo nunca de encontrarte dondequiera que vaya.

Tú no te cansas nunca de escucharme
y de hacerme el bien.
Y yo estoy seguro de ser amado
siempre que yo te amo.

No necesitas para nada mis bienes
y no te empobreces nada
al darme los tuyos.
Y aunque yo sea muy miserable,
y encuentres personas más nobles,
más puras y más santas que yo,
no por eso dejas de ser mi amigo.
Y la muerte,
que me separará de todos mis amigos,
me reunirá contigo.

Ninguna desgracia propia de la edad o de la vida
te alejará de mí, sino que más bien, al contrario,
cuando todo me sea adverso,
Tú estarás más cerca de mí que nunca,
y yo gozaré plenamente de tu compañía.

Tú soportas mis defectos
con una paciencia admirable,
y ninguna de mis infidelidades y mis ingratitudes
te hieren tanto
que no estés siempre dispuesto a volver a mí,
si yo te lo pido.

(San Claudio La Colombière)